La reacción de los patrocinadores contra Donald Sterling, dueño del equipo de baloncesto Los Ángeles Clippers, ha comenzado.
CarMax, un sitio en línea para comprar automóviles, así como la aerolínea Virgin America informaron este lunes que concluirán sus patrocinios con los Clippers de la NBA después de los presuntos comentarios racistas realizados por Sterling.
"CarMax encuentra los comentarios atribuidos al dueño de los Clippers completamente inaceptables”, detalló en un comunicado.
“Estos puntos de vista generan conflicto directamente con la cultura de CarMax sobre el respeto para todos los individuos. Si bien hemos sido un patrocinador orgulloso de los Clippers por nueve años y apoyamos al equipo, a los aficionados y a la comunidad, estas declaraciones fuerzan a CarMax a terminar su patrocinio”.
Virgin America, en un comunicado, dijo, “si bien continuaremos apoyando a los aficionados y a los jugadores, Virgin America ha tomado la decisión de terminar su patrocinio con Los Ángeles Clippers".
Otro patrocinador, la aseguradora State Farm, catalogó los comentarios emitidos por Sterling como “ofensivos”.
“Si bien falta de resolver los hechos, vamos a tomar una pausa en nuestra relación con la organización”, dijo State Farm. “Estamos monitoreando la situación y vamos a evaluar continuamente nuestras opciones”.
State Farm también dijo que tiene una “gran relación” con el jugador estrella del equipo, Chris Paul, y que continuará con la campaña publicitaria de televisión que lo incluye.
La ráfaga de anuncios se presenta días después de que un reporte de TMZ informara que Sterling realizó comentarios despectivos sobre la gente negra en una conversación telefónica con su novia V. Stiviano, después de que la mujer publicara una foto junto con el exjugador de la NBA Earvin Magic Johnson.
Los jugadores de los Clippers organizaron una protesta silenciosa el domingo. Mientras calentaban para un partido de postemporada de la NBA, los jugadores se quitaron sus playeras de calentamiento con logos del equipo para revelar playeras rojas portadas al revés, con los logos ocultos. Terminaron de calentar, se quitaron las playeras rojas y jugaron el partido con sus uniformes regulares.
La Asociación Nacional de Jugadores de Basquetbol del país demandó que Sterling fuera excluido de todos los partidos de postemporada. Los jugadores también quieren un informe de las acusaciones pasadas de racismo en contra de Sterling; una explicación de qué tipo de medida disciplinaria podría ser emitida; y que la NBA les asegure que el comisionado de la liga trabajará con la asociación y que la investigación se realizará rápidamente.
La reacción corporativa hace recordar el escándalo de Paul Deen en 2013, cuando los patrocinadores abandonaron a la superestrella de cocina del sur, después de que admitiera, durante un testimonio ante una corte, de haber usado en una ocasión un comentario racista. Pero con el apoyo de una base sólida de fanáticos y un nuevo inversionista, la mujer abrió un nuevo restaurante.
En un escándalo similar, la estrella del programa de televisión "Duck Dynasty", Phil Robertson realizó comentarios racistas y homofóbicos en una entrevista con la revista GQ que también desató una tormenta de fuego. Pero el magnate de la caza de patos logró salir del problema.
La cadena de televisión A&E lo relegó temporalmente del programa de televisión pero regresó al programa en medio de una respuesta de sus fanáticos. El escándalo no interfirió con el lanzamiento de una serie de armas a través de Mossberg.
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